Lugar Histórico – Espacio de la Memoria

La Masacre de Los Surgentes

Este sitio, tristemente conocido por los acontecimientos de 1976, donde fueron acribillados 7 jóvenes pasó a la historia como lugar de la Masacre de Los Surgentes.

A partir de la Sanción de Legislatura de la Provincia de Córdoba declarándola parte del patrimonio histórico de la Provincia, el Legislador Daniel Passerini (PJ), autor del proyecto, dijo al momento de fundamentar la Ley que “es indispensable reflexionar sobre la importancia fundamental de hechos del pasado reciente para interpretar nuestras actuales contradicciones, para seguir luchando por una patria justa, libre y soberana, para defender nuestras libertades y comprometernos todos los días con el sistema democrático” sostuvo.

Este proyecto surge a partir de un trabajo de investigación que llevaron adelante un grupo de alumnos de Tercer Año del Instituto Secundario Presbítero Castoldi, de Los Surgentes: “Este trabajo realizado por docentes y alumnos, a través del ejercicio de la memoria activa para la reconstrucción de la historia real, merece todo nuestro reconocimiento y nos marca claramente que en nuestra sociedad se arraiga cada vez más el compromiso con la defensa de los derechos humanos y el repudio al terrorismo de estado y a la violencia genocida en cualquiera de sus formas y manifestaciones”.

“El trabajo de investigación llevado adelante por la docente Nancy Marino y los alumnos permitió recrear valiosos testimonios, como el del agente de policía que debió trasladar los cuerpos sin vida a la comisaría local, el médico que dejó constancia de la muerte de los jóvenes, el comisionista que trasladó los cuerpos a la ciudad de Córdoba, hechos que permitieron aportar información a la causa “Díaz Bessone” que se sustancia actualmente en Rosario, y reconstruir una historia silenciada por la muerte y por los años” resaltó.

“Lazos de Identidad”. En 2010, alumnos de 3º Año del Instituto Privado Diocesano “Pbro. Emilio Castoldi, de Los Surgentes, comenzaron a indagar sobre lo ocurrido y, a partir de allí y de varios testimonios de vecinos de la localidad, elaboraron un Proyecto de Ordenanza que después fue acompañado por los concejales de esa ciudad.

A raíz de esa iniciativa estudiantil, la Municipalidad de Los Surgentes promulgó luego la Ordenanza Nº 132, del 22 de Octubre de 2010, que declaró de “Interés Municipal” el proyecto denominado “Lazos de Identidad” elaborado por los alumnos.

Esa misma Ordenanza declaró también “Lugar Histórico” al sito en que fueron hallados los cuerpos sin vida de estas siete jóvenes víctimas. Además, se dispuso la colocación de una placa recordatoria en el lugar indicado y la plantación de 7 árboles sobre la margen del camino en donde fueron hallados los cuerpos. La actividad escolar trascendió al establecimiento y movilizó a toda la comunidad que recordaba el hecho como uno de los más tristes de su historia.

“Masacre de Los Surgentes”. El 17 de Octubre de 1976 fueron encontrados en un camino rural de Los Surgentes los cuerpos sin vida de 7 jóvenes secuestrados por el Servicio de informaciones de la Jefatura de Policía de Rosario, luego sacados por personal policial de esa Unidad y llevados a territorio de la Provincia de Córdoba donde fueron asesinados.

Las 7 víctimas fueron:

• Cristina Constanzo
• María Cristina Márquez
• Analía Murguiondo
• Daniel Oscar Barjacoba
• Sergio Abdo Jalil
• Eduardo Felipe Laus
• José Antonio Oyarzábal

El grupo de trabajo “Memorias Surgentes” gestionó ante la municipalidad la realización de un monolito y cartel recordatorio para ser colocado en el “Complejo del Centenario” con la intención de que exista dentro de la localidad un espacio para la Memoria que recuerde los hechos acaecidos el 17 de Octubre de 1976 con una presencia continua, en un lugar de tanta actividad cultural, donde los jóvenes sobre todo pudieran tener presente el valor de la Democracia.

Este Monolito lleva el diseño lleva una imagen representativa de los hechos cuyo diseño fue realizado por la Profesora de Bellas Artes Gabriela Ferroni, donde se pueden observar siete rostros entrelazados con expresiones de asombro, tristeza, olvido, dolor, etc. emociones que nos evocan aquel tiempo donde nuestros derechos fueron absolutamente menguados.