Ex Combatientes de Malvinas
Homenajea a nuestros veteranos de Malvinas
El 2 de abril de 1982, las Fuerzas Armadas de nuestra Patria, ocuparon el territorio de las islas Malvinas (hacía exactamente ciento cuarenta y nueve (149) años que estaban en poder del reino de Gran Bretaña, por un acto de verdadera rapiña), ese día Argentina recuperó la soberanía sobre el Archipiélago de Malvinas, Georgias y Sandwich del Sud.
El diario La Nación, en uno de sus artículos afirmaba que Jenn Morgan del The Guardian de Londres, había expresado un mes antes, en la ciudad de Mendoza, en ocasión de celebrarse la Fiesta de la Vendimia, que desde el de febrero se tenía información bastante cierta sobre una invasión en las Malvinas, por fuerzas Argentina.
A las veinticuatros (24) horas de recuperadas nuestras caras y amadas islas de sud, por Resolución Nro. 502 de la O.N.U., se dispuso el cese inmediato de las hostilidades, como así de todas las fuerzas argentinas, y buscar una solución diplomática a los reclamos de nuestro País.
El 4 de abril salió del puerto de Portsmouth rumbo a Malvinas, una poderosa flota británica para recuperar las islas argentinas.
Un enviado del presidente norteamericano, Ronald Reagan, el Famoso y triste general Alexander Haig llegó a la ciudad de Buenos Aires, para negociar y mediaren el conflicto argentino-británico. El 19 de abril, Haig regresó al País del Norte, después de largas y agitadas conversaciones con funcionarios argentinos, sin un resultado positivo, señalando que los Estados Unidos apoyaría a Gran Bretaña y que la guerra en el Atlántico Sud significaría una tragedia, fundamentando sus díceres dados los acuerdos o pactos preexistentes entre su País y el Reino Unido.
Por otro lado la Comunidad Económica Europea (Gran Bretaña, Francia, Alemania Occidental, Italia, Grecia, Holanda, Bélgica, Dinamarca, Irlanda y Luxemburgo) dispusieron medidas económicas en contra de Argentina, quedando solidaria con Gran Bretaña.
El 26 de abril naves británicas, con apoyo de fuerzas aéreas recuperaron las Georgias.

Por su parte el órgano de consulta de la O.E.A., aprobó por diecisiete (17) votos, contra (4) abstenciones (Estados Unidos, Chile, Colombia y Trinidad Tobago) una resolución de apoyo a nuestra Patria, basado en el artículo 6to., del Tratado Interamericano de Asistencia Recíproca. La abstención norteamericana señaló una traición al pacto que los Estados Unidos impusiera, oportunamente, al Continente, ahora a la vista que con el único objetivo de utilizarlo en propio beneficio.
El 1 de mayo, después de establecer un bloqueo sobre nuestras costas, Inglaterra con el apoyo incondicional de Estados Unidos, lanzó un ataque aeronaval sobre las Malvinas. España calificó este accionar inglés como un grave error histórico.
El 3 de mayo, fuera de la zona de bloqueo, los ingleses hundieron el crucero “General Belgrano” con mil cuarenta y dos (1.042) hombres a bordo, acción lamentable donde desaparecieron cuatrocientos (400) argentinos.
Javier Pérez de Cuellar, secretario de la U.N., fracasó en sus gestiones de lograr un acercamiento diplomático, ante la intransigencia británica en la persona de la primera ministra Margaret Tatcher y el canciller Francis Pyn, quienes exigían el retiro incondicional de las tropas argentinas.
El 17 de mayo Italia e Irlanda levantaron las sanciones contra Argentina.
Inglaterra y Estados Unidos vetaron en U.N. una moción de cese de fuego; en tanto el ministro Costa Méndez se entrevistó en La Habana con Fidel Castro, ante la postura de solidaridad a nuestro País por los Países no alineados, agregándose luego Venezuela, Panamá y Perú, quienes ofrecieron toda clases de ayuda.

El 3 de junio el Consejo de Seguridad de la O.N.U. aprobó por diez (10) votos a favor (Estados Unidos, Francia, Guyana, Irlanda, Japón, Jordania, Tojo, Uganda, Zaire y Gran Bretaña); cuatro (4) abstenciones (China, Unión Soviética, Polonia y España) y uno (1) en contra (Panamá) el proyecto de resolución inglés que demandaba el cese inmediato de las hostilidades retiro de las fuerzas argentinas y la urgente búsqueda de una solución negociable. El entonces canciller de nuestro País, doctor Nicanor Costa Méndez manifestó que: “No se negociaría la soberanía, porque no es negociable”. Postura que mantuvo durante todo el conflicto argentina.
El 11 de junio llegó a la ciudad de Buenos Aires el Papa Juan Pablo II, después de una visita a la ciudad de Londres, aquí en la Argentina el Sumo Pontífice rezó por la Paz en misas multitudinarias tanto en Capital Federal como en la Basílica de Lujan; dos días después, al partir, prometió volver en momentos de paz. Es indudable que su Santidad fue portador de la postura de los ingleses de no ceder en ningún momento y continuar la guerra hasta sus últimas consecuencias.
El 14 de junio (cuarenta y cinco (45) días después de la recuperación de Malvinas), por el comunicado Nro. 163 del Estado Mayor Conjunto, dado a las 16 y 30hs. se informó al pueblo argentino, el cese de fuego en Malvinas, al cual siguió la capitulación del general Mario Benjamín Menéndez, Gobernador Militar y Jefe Supremo de las fuerzas nacionales en Malvinas, ante el general Jeremy Moore, Jefe de las tropas inglesas. El Documento fue firmado en Puerto Argentino.
El 15 de junio anunciada la capitulación militar frente a los ingleses, el pueblo argentino expresó en manifestaciones callejeras su posición en contra del Gobierno. Se cuestionó entre otras cosas: la oportunidad, la estrategia utilizada y los errores cometidos frente a la relación de fuerzas, viendo recién entonces que se debió luchar no sólo con Gran Bretaña y Los Estados Unidos, sino contra la N.A.T.O. y las sanciones de la Comunidad Económica Europea.
Fueron muchos los argentinos que dieron de sí lo mejor que tenían, aún sus preciosas vidas en este episodio de nuestra Historia Nacional. Allí en Malvinas quedaron, para siempre muchos de nuestros soldados, suboficiales y oficiales; otros en tanto volvieron malheridos y con secuelas físicas y psíquicas que serán amargos recuerdos para el resto de sus vidas.
Los Surgentes estuvo presente en este episodio de nuestra Historia, con cuatro de sus hijos que fueron ex – combatientes de Malvinas: Edgardo Martinenco, Carlos Daniel José Volpi, Omar Javier Giulianelli y Gerardo Javier Vaccarini.
Edgardo Martinenco, revestía como soldado de la clase 1963, en la Guarnición Militar Sarmiento – provincia de Chubut- quien estuvo durante el conflicto de Malvinas, en el Puerto Argentino y fue evacuado a tierra firme el 14 de junio.
Carlos Daniel José Volpi, clase 1963, relató a la que escribe esta obra, que el 2 de febrero de 1982 fue incorporado al Ejército en la Guarnición Militar Sarmiento – provincia de Chubut – Regimiento de Infantería. El 2 de abril desembarco en Malvinas – Puerto Argentino – siendo destinado al Aeropuerto – Sección Apoyo – hubo de rendirse con sus compañeros el 13 de junio, regresando al Continente el 15 de junio en la nave «Bahía Paraíso» (nave hospital), siendo desembarcado en el puerto de Santa Cruz. Subjefe del Regimiento Infantería 25 era el coronel Mohamed Alí Seineldín. Hoy reside en Los Surgente, dedicado a tareas agrícolas-ganaderas.
Omar Giulianelli, soldado de la clase 1963, en Guarnición Militar Sarmiento – provincia de Chubut, el 2 de abril desembarcó en Puerto Argentino donde fue destinado como soldado de guardia y vigilancia en la pista de aterrizaje siendo evacuado el 8 de junio. Dedicado a tareas del agro en la zona rural de los Surgentes, actualmente.

Tanto Carlos Daniel José como Omar después de ser desembarcados en el Puerto de Santa Cruz, hicieron escala en Río grande, de allí pasaron a Comodoro Rivadavia e internados en el Hospital Regional y luego trasladados al Hospital Militar de Campo de Mayo (durante cuarenta (40) días), posteriormente volvieron a la Guarnición Militar Sarmiento. El 27 de julio fueron licenciados llegando Los Surgentes el 15 de agosto, cinco días después fueron dados de baja.
Gerardo Javier Vaccarini, a pedido de la autora de este libro, me escribió sus experiencias como ex – combatiente de Malvinas, que por su sencillez y cariño no puedo dejar de confesar que al leerlas, mis ojos de cuajaron de lágrimas y como argentina me sentía orgullosa de nuestros saldaditos, que escribieron una página más de nuestra historia.
Gerardo Javier, como sus compañeros de Los Surgentes fue incorporado el 2 de febrero en la ciudad de Rio Cuarto (provincia de Córdoba) y desde allí fue trasladado en tren a la ciudad de Córdoba, donde pasaron la noche. El 3 de febrero a la mañana y tras dos (2) horas de vuelo llegaron a Comodoro Rivadavia, desde este punto en un colectivo tanto Gerardo Javier, como sus compañeros, fueron llevados a Colonia Sarmiento – provincia de Chubut-, destino final. Siendo incorporado a la Compañía 9 que con el Grupo de Artillería 5 y el Regimiento de Infantería 25, conformaban la Guarnición Militar Sarmiento, al mando de la cual estaba el teniente coronel Mohamed Alí Seineldin, siendo su Jefe de compañía el mayor Oscar Minorini Lema. Durante un mes recibieron instrucción militar a orillas del Río Senger, posteriormente la preparación continuó en las instalaciones militares. El 1 de abril fueron trasladados a Comodoro Rivadavia y tras dormir allí, el día 2 en avión volaron a Malvinas, donde llegaron entre las 9 y 30 y 10 hs., a Puerto Argentino (ex – Puerto Stanley). En el avión donde ellos habían viajado, al retornar al Continente fueron trasladados los restos mortales del capitán Giachino, primera víctima argentina en esta campaña.
Después de permanecer dos (2) días en Puerto Argentino, de noche dormían en el rompehielos Almirante Irízar, Gerardo Javier y un grupo de soldados, suboficiales y oficiales fueron embarcados en el buque «Isla de los Estados» con los integrantes del Regimiento de Infantería 25, siendo los mismos repartidos en distintos lugares de la Isla, navegando por el Estrecho San Carlos, Gerardo Javier y un grupo de soldados fueron desembarcados en Bahía de Los Zorros.
Las tropas inglesas tardaron quince (15) días en llegar a las Malvinas, nos cuenta Gerardo Javier, en tanto nuestras tropas prepararon la defensa (cavando pozos de zorros, minando campos, distribuyendo alambrados y levantando simulaciones de armamento). Al cabo de un mes nuestra fuerza militares entraron en acción, dado que entonces quienes habían participado activamente los suboficiales y oficiales, solo tuvieron un importante comportamiento en las distintas acciones cual verdaderos héroes.
El 16 de mayo, en la zona en donde estaba destinado Gerardo Javier, sufrió el primer ataque aéreo, al cual le sucedió una serie de otro, por parte de la artillería naval inglesa, siendo las horas preferidas para atacar el horario nocturno.
La defensa de nuestras tropas estaban en inferioridad de condiciones por muchas causas, entre ellas debemos destacar que los cañones de nuestras fuerzas llegaban a sólo once (11) kilómetros, en tanto los bombardeos navales ingleses eran de veinte (20) kilómetros.
Mas, Gerardo Javier, recuerda que hubo un intento de desembarco inglés en Ganso Verde, que fue frustrado por nuestra aviación.
El 14 de junio fueron rendidas nuestras fuerzas y tanto soldados, como suboficiales y oficiales debieron entregar el armamento a su cargo a los británicos.
Gerardo Javier y sus compañeros fueron tomados prisioneros y bajo las órdenes de militares ingleses les hicieron tapar pozos y zanjas, levantar los alambrados de púas y desactivar las minas que habían colocado en los campos cercanos, durante cuatro (4) días.
En helicópteros las tropas argentinas fueron trasladadas a Sea King (Rey de Mar) donde los alojaron en una fragata, durante un día; desde allí pasaron en un trasladador al buque «Norlan» en horas de la noche.
El «Norlan» en su viaje iba recogiendo grupos de prisioneros hasta llegar a Puerto Argentino. En el camino a tierra firme el «Norlan» fue seguido por dos (2) fragatas inglesas.

El día 21 de junio a las 10 y 30 hs. llegaron nuestros sufridos soldados a Puerto Madryn, de allí en colectivo se los llevó a Trelew y en avión a Comodoro Rivadavia, donde pasaron dos (2) días en recuperación. Regresando, finalmente, a la Guarnición Sarmiento. Después de permaneces durante quince (15) días allí fueron licenciados por dos (2) semanas Gerardo Javier, fue dado de baja el 18 de agosto, desde Comodoro Rivadavia regresó en avión a la ciudad de Córdoba con sus compañeros.
Este es el testimonio de un soldado argentino, que con orgullo supo defender el pabellón nacional, hasta último momento en suelo de las Malvinas.
Gerardo Javier, hubo de escribir un diario de las vivencias vividas en el Archipiélago, mas al ser tomado prisionero los ingleses se los incautaron. Hoy ejerce en Los Surgentes su profesión de contador. Los ex – combatientes de Malvinas de Los Surgentes, están integrados a la Agrupación Veteranos de Guerra del Sudeste de Córdoba, participando en reuniones y congresos nacionales de ex – combatientes.

Fuente: Transcurso Histórico de Los Surgentes. Año 1992 Marta Núñez
Ex Combatientes
- Vaccarini, Gerardo
- Giulianelli, Omar
- Volpi, Carlos
- Martinenco, Edgardo (reside en Inriville)
Ciudadanos bajo Bandera
- Isaía, Aldo
- Bozikovich, Javier
- Buttarelli, Eduardo Germán
- Paolorossi, Abel
- Casalis, Rodolfo
- Gagliardi, Iván
- Skalko, Gerardo
- Rubiolo, Eduardo
- Poli, Adrián
- Colacilli, Javier
